La llamada Cruz del Papa en la zona de Tres Cruces es un monumento que recuerda la histórica visita de Juan Pablo II a Uruguay en 1987. En la discutida ley que dictaminó su permanencia, se estableció también que fuera la Iglesia Católica la que se hiciera cargo de los costos de su mantenimiento, en lo que constituye una excepción, pues los demás monumentos de la ciudad son mantenidos por la Intendencia.

Con cierta periodicidad la Arquidiócesis realiza los arreglos pertinentes. La última vez, en 2015, se solucionaron problemas de oxidación y se la pintó entera. El trabajo implicó contratar a una empresa especializada en alturas, y se pudo realizar gracias a donaciones de fieles.

En esta ocasión se interviene a raíz de unos grafitis en la zona de la base. Se usará una pintura anti vandálica, para intentar evitar daños futuros. No es necesario el trabajo en altura como la vez pasada.

Asimismo, se aprovecha la instancia para lijar y pintar las rejas del cerco perimetral, que no habían sido mantenidas hasta ahora. También se procurará mejorar las luminarias, que en algunos casos han sido vandalizadas también y deben ser reparadas, así como la base de mármol de la estatua. En una siguiente etapa se procurará hacer un tratamiento a la escultura del Papa San Juan Pablo II que se encuentra allí mismo desde el año 2005, cuando se trasladó desde el santuario del Señor Resucitado.

Las obras son financiadas por la Iglesia Católica de Montevideo y se realizan en coordinación con el Centro Comunal Zonal y la Intendencia.