La Academia de Líderes Católicos Uruguay (ALC Uy) comenzará su programa de formación el sábado 7 de agosto con la sesión inaugural y la última sesión será el día 13 de noviembre. Una semana después, el sábado 20, se realizará la ceremonia de graduación. Para presentar esta nueva generación el jueves 22 de julio, se realizó un workshop de lanzamiento que contó con la presencia de José Antonio Rosas, director de la Academia Latinoamericana de Líderes Católicos. Allí se presentó la actualidad de la Academia a nivel continental, la propuesta para este año y dos egresados compartieron sus testimonios. Para este año se destaca la alianza que ALC Uy ha hecho con la Fundación Konrad Adenauer, y la posibilidad de contar con la presencia de relevantes expositores del exterior como Eduardo Almeyda —representante del Banco Interamericano del Desarrollo en Honduras— o el P. Francisco Hernández —responsable de Pastoral Social del CELAM—.
¿Qué es la Academia de Líderes Católicos?
La ACL Uy tiene como objetivo formar católicos que a partir de la experiencia cristiana desarrollen su vocación política con la ayuda de la Doctrina Social de la Iglesia (DSI). Tiene como misión formar líderes desde una perspectiva católica, arraigados en la fe de la Iglesia, para transformar el mundo social, político y económico a la luz de la DSI. La Academia Latinoamericana de Líderes Católicos surgió en Chile en el año 2015 y actualmente se encuentra presente en siete países del continente: Chile, Uruguay, Brasil, Colombia, Costa Rica, Perú, México y también en España. La Academia de Líderes Católicos de Uruguay (ALC Uy) tiene la particularidad de ser la primera fundada fuera de Chile, su país de origen. Para este año la ALC Uy ofrece un programa de formación, en colaboración con la Fundación Konrad Adenauer, para jóvenes de 20 a 35 años de edad que tengan inquietud por el servicio en el plano político, económico o social. Este programa se impartirá los días sábados de 9 a 13 hs, comenzando el 7 de agosto a las 11 hs con la ceremonia inaugural. La última sesión tendrá lugar el sábado 13 de noviembre y la ceremonia de graduación será el sábado 20 del mismo mes, en horas de la tarde.
¿Qué es la Fundación Konrad Adenauer?
La Fundación Konrad Adenauer (KAS) es una organización no gubernamental que promueve los valores de libertad, justicia y solidaridad. La KAS es una fundación política alemana allegada a la Unión Demócrata Cristiana (CDU) que lleva el nombre del primer canciller federal alemán, Konrad Adenauer (1876-1967). En Uruguay la KAS está desde 1969 fomentando la democracia, la libertad y la solidaridad. Hoy, a través de programas de formación y el debate político, el Programa Uruguay trabaja en el fortalecimiento de partidos políticos y de instituciones en los diferentes niveles de gobierno. La KAS también aspira a contribuir a la discusión sobre la inserción internacional del Uruguay en el mundo multilateral en las esferas políticas y económicas.
Costo y modalidad
El Curso tiene un costo de 3.500 $U (tres mil quinientos pesos uruguayos) y se abonará por transferencia bancaria. Por el momento no se ha definido la modalidad en la que se llevará a cabo la formación, debido a la variabilidad de la situación sanitaria. Por esta razón, se esperará a las medidas que el gobierno nacional tome en materia educativa, sobre todo las vinculadas a la presencialidad en la educación terciaria.
Hay tiempo para inscribirse hasta el viernes 30 de julio. Puede hacerlo aquí.
Testimonios
"El curso te abre las puertas al diálogo y al debate" - BELÉN DUGONJIC Arquitecta
Llegué a la Academia de Líderes Católicos por dos amigas que ya la habían hecho. Me anoté con mi hermana, como una formación para hacer juntas. Nos pareció muy buena la combinación entre herramientas para el liderazgo y una mirada de la Iglesia sobre temas de actualidad. Además, sumado a la formación, hay un contenido espiritual muy importante.
El curso te abre la puerta al diálogo y al debate. Sentimos que nos fortaleció mucho en esos aspectos ya que no te deja indiferente ante los problemas que hoy sufren nuestro país y el mundo. Además, te ayuda a formarte una opinión contundente y certera, como católica, ante la realidad. También te afianza conceptos sobre la Doctrina Social de la Iglesia y el Catecismo. Las charlas de referentes católicos en distintas áreas (política, social, comunicación, etc.) que te ayudan a reflexionar e involucrarte en los temas de actualidad son muy valorables.
Algo importante para mí es el grupo que se formó entre los jóvenes que cursamos, bien diverso, de diferentes zonas y realidades —lo que enriquece mucho el diálogo—; y con mucha fuerza para hacer cosas allí donde nos toque estar.
Es importante que haya jóvenes con una formación sólida para dar a conocer la verdad de la Iglesia, la verdad de Jesús. Jóvenes que podamos evangelizar desde el lugar en donde nos toque estar.
Para aquel que esté pensando en hacerlo, este curso te ayuda a tener bases sólidas para poder influir de manera positiva en nuestro entorno, con una formación clara en la doctrina de la Iglesia, para poder dar a conocer la verdad de Jesús.
"La centralidad de la DSI" - PABLO RODRÍGUEZ Economista
Me enteré de la Academia a través de las redes, tanto de ICM como de la comunidad parroquial. Si bien tenía conocimiento de su existencia no pude llegar a inscribirme en la primera generación. Yo buscaba lugares donde seguir formándome, y hablando con mi acompañante espiritual vimos que esta era una buena opción por sus contenidos.
Y más allá del contenido, fue una posibilidad de interactuar con otros jóvenes católicos y con las personas que iban a dar el curso, desde distintas posiciones y perspectivas.
Destacaría la centralidad, que durante todo el curso, se le da a la DSI en todos sus aspectos, así como los testimonios y los trabajos en las comunidades. Otro punto importante es la posibilidad de conocer actores de la sociedad civil, que desde su lugar de católicos lideran distintas acciones.
El paso por la ALC Uy me fortaleció por el hecho de que soy economista y trabajo en la función pública, y mi vocación está ligada a colaborar desde mi lugar, para que todos puedan vivir más y mejor —principalmente los más vulnerables—. Me ayudó para ser, desde mi contexto, un cristiano comprometido y hacer patente la DSI de una manera sencilla, amena y nunca desde un lugar de ataque, sino —al revés— desde un punto de vista integrador en esta sociedad plural.
Para quien esté pensando en anotarse, le diría que es una oportunidad de llevar lo que la Iglesia tiene para decir y aportar en una sociedad plural; lo que vive, lo que cree, lo que celebra, para que los demás también nos puedan reconocer como cristianos a través del diálogo. Uno crece mucho no solo en la formación, sino también en lo espiritual y lo comunitario. Es altamente recomendable esta instancia de la Academia de Líderes.
"Necesitamos muchos líderes católicos" - CAMILA ÁLVAREZ Diseñadora de moda
Supe de la existencia de la Academia de Líderes por los sacerdotes de la Parroquia María Reina de la Paz —los padres Marcelo Marciano y Mathías Soiza—. Ellos me contaron sobre el curso, y al principio —un poco por desconocimiento— no veía en qué me podía ayudar. Yo soy diseñadora de moda y veía muy alejado el vínculo del liderazgo católico con mi realidad profesional.
Pero luego, buscando información, y dialogando con otras personas que habían realizado la formación, me empecé a interesar por el tema, así que decidí anotarme.
La academia me ayudó mucho para conocer diferentes aspectos de la vida de la Iglesia, ya que el curso aborda varios temas súper interesantes como la profundización en temas teológicos y de fe, cómo poder comunicarme mejor con las personas (por medio del coaching), conocer y darle importancia al bien común y —lo más importante— cómo puedo ayudar a las personas teniendo a Jesús como centro.
Creo que Uruguay necesita muchos líderes católicos en todas las áreas. Para mí fue todo un desafío ya que siempre me surgía la pregunta de cómo poder ayudar, o darle un mensaje de esperanza a las personas estando en un mundo laboral tan particular como lo es la moda.
Y, además, después de este camino creo que la academia me ayudó a abrir los ojos y ver que en cualquier área de la política y la sociedad se necesita un líder católico”
