La Escuela Católica de Enfermería es la que tiene más trayectoria del país y actualmente ofrece 8 cursos a más de 400 alumnos
Contando con un numeroso grupo de enfermeras católicas prácticas, por los años 30 en Montevideo, fue fácil agruparlas en torno a la Santísima Virgen bajo la advocación de Nuestra Señora de los Remedios, patrona de los enfermos, y fue así que el día 21 de diciembre de 1934 en la capilla de las Rvdas. Hnas. Capuchinas ofrecieron una Misa de Comunión celebrada por Mons. Antonio María Barbieri, quien exhortó a agruparse en Asociación para ejercer con más eficacia el apostolado y fortalecerse a sí mismas con actos de piedad y devoción.
La semilla sembrada con cariño por Mons. Barbieri, primer director de la Asociación, cayó en fértil tierra y el 7 de junio de 1935 quedó establecida en la sede de las RR. Hnas. Dominicas la Congregación de Nuestra Señora de las Remedios Asociación de Enfermeras Católicas y se empezó con 70 asociadas. Tiempo después, en marzo de 1956 se firmó un convenio entre las Asociación de las enfermeras católicas Nuestra Señora de los Remedios y la congregación de las Hnas. Franciscanas de la Natividad de Nuestra Señora.
“La Asociación comenzó con esposas de médicos, damas de la sociedad, que luego que envejecieron necesitaban la colaboración de más mujeres para seguir con la obra. Es por eso que Mons. Barbieri solicitó a las Hnas. Franciscanas que se pusieran a cargo de la dirección de la Asociación”, explica Margarita Requiterena, quien en la actualidad trabaja en la dirección de la Escuela católica de Enfermería.
“El diferencial que ofrecía esta escuela es que era la única escuela de enfermería católica, con enseñanza de la enfermería humanizada. Las Hnas. Franciscanas ejercen su carisma a través de la enseñanza de la enfermería a personas de los sectores más humildes. Los estudiantes que vienen aquí son jóvenes de contextos difíciles o con pocas posibilidades económicas para pagar su educación”, agrega Margarita.

F. Gutiérrez
Convenio de las Hnas. Dominicas y la Universidad Católica del Uruguay
Durante 18 años existió un convenio entre las Hnas. Dominicas y la Universidad Católica del Uruguay para crear lo que se llamó la Facultad de la Enfermería y Tecnología de la Salud, a nivel de educación terciaria, con las carreras de Lic. En Enfermería, Psicomotricidad, Fisioterapia y Nutrición. Fue en ese momento cuando las Hnas. Franciscanas construyeron el actual edificio de cuatro pisos, en la calle Av. Garibaldi 2918, anteriormente había estado en una casa en la Av. 18 de Julio y luego sobre la Av. 8 de Octubre.
“Cuando finalizó el convenio no se renovó ya que este es una Escuela de Enfermería, un instituto de enseñanza media, técnica… y se decidió que no podía estar dictando clases a nivel terciario. Por lo que se diluyó el convenio en excelentes términos y quedamos con la actual Escuela Católica de Enfermería funcionando en este mismo edificio, como una institución de educación media”, señala Margarita.
Son tres las Hnas. Franciscanas que viven en el convento, junto a la Escuela: la Hna. Superiora Asunción Álvarez, la Hna. Norma Guanuco y la Hna. Guadalupe Cháves, quienes se encargan de la coordinación y dirección de la Escuela, y trabajan, a su vez, en diferentes actividades en la Parroquia Tierra Santa, próxima a su convento y Escuela.

F. Gutiérrez
Cursos y prácticas con valores humanistas
En la actualidad la Escuela católica de Enfermería cuenta con 450 estudiantes y 25 docentes. Allí se ofrecen cursos de auxiliar de farmacia, auxiliar de enfermería integral, auxiliar de laboratorio, vacunación, higiene ambiental, hemodiálisis, camillero y servicio, cocina y tisanería. La duración de los cursos varía, el más largo es el de auxiliar de enfermería integral (24 meses) y el más corto es el de camillero (2meses). El edificio cuenta con aulas de clases, laboratorios, salón de actos y un oratorio.
Todos estos cursos reciben formación humanística con asignaturas como ética, sicología y pastoral, y además los alumnos hacen prácticas en diferentes centros de salud como el Hospital Pasteur, Hospital Piñeyro Del Campo y Hospital Pereira Rossell, donde ponen a prueba los conocimientos técnicos y humanos adquiridos en la Escuela.
Recortes de un periódico de setiembre de 1936
Las hermanas aún conservan periódicos con reseñas de todas las épocas de la escuela.
«En la tarde de ayer se inauguró la sede de las Enfermeras Católicas instalada en la amplia casa de la Av. 18 de Julio 2143. Con la presencia de numerosas personas se bendijo el local y se intronizó una imagen del Sagrado Corazón de Jesús, ceremonia a cargo del excelentísimo Señor arzobispo de Montevideo, Dr. Juan Aragone. Estuvo presente el arzobispo coadjutor de Montevideo Antoño María Barbieri, quien tiene a cargo la dirección de la Asociación. (…) Para finalizar diremos que vimos las siguientes familias: Terra Ilarraz, Salvañach Sónora, Grondona Cibils Salvañach, Castells Carafi Mendívil, Braga Salvañach, Barbieri, Brena Scaravino, Pizzorno Pereira Machado, Pintos Rebollo, Lusich Lerena, RamassoAramendía, Olmos Muñóz, Gómez Sanguinetti, Iglesias Rosas, Dominguez Salvañach, Vanrel Pastoor, Pastor Salvañach, Flores Viana, Herrera Muñoz, Iriarte Platero, Castells Eastman, Guimaraens García Martínez, Nunes Ribeiro Cibils Larravide, Méndez Reissig, Carril Costa, Olivera Wells Benzano, Chiarino Grondona, Folco Grondona, Emile Grondona, Bonino Bidart, Ponce de León, Milans Correa, Bulter Sosa, muchas que escapan a nuestra memoria y un núcleo numeroso de enfermeras católicas, voluntarias y profesionales”.

