Cerca de cuarenta integrantes de Iglesia Joven Montevideo serán parte de un encuentro que contará con la presencia del papa León XIV.
La Iglesia católica vive el Año Jubilar. Un año santo, un año de gracia. Cada vocación ha tenido —y tendrá durante los próximos meses— su propio jubileo. Ya pasaron el de los artistas, los diáconos, los voluntarios, los enfermos, las personas con discapacidad, los trabajadores, los empresarios y muchos otros más.
Ahora es el turno del jubileo de los jóvenes, que se celebrará del 28 de julio al 3 de agosto en Roma. Desde Montevideo, unos cuarenta jóvenes viajarán para ser parte de esta experiencia.
Iglesia Joven Montevideo impulsó la convocatoria, en la que se inscribieron jóvenes pertenecientes de distintas parroquias y movimientos de la capital. Muchos de ellos participan en el Centro Pastoral de Iglesia Joven, ubicado en la parroquia María Reina de la Paz (Bulevar José Batlle y Ordóñez 2645).
El grupo partirá el sábado 26 de julio y regresará el jueves 14 de agosto. Lo acompañarán los sacerdotes Marcelo Marciano —párroco de María Reina de la Paz y vicario de los jóvenes y las vocaciones en Montevideo— y Josué Hernández, vicario de dicha comunidad. Todos participaron, el pasado 1.° de julio, en la misa de envío que presidió el cardenal Daniel Sturla en la parroquia María Reina de la Paz.
“Nunca participé en un jubileo”, dijo Marciano a Entre Todos. “Me parece que esta instancia llega en un contexto lindo después de todo lo que nos tocó vivir: muertes, sufrimientos, dolores. Y además, es ver una Iglesia viva porque es el jubileo de la esperanza, sabiendo que la Iglesia nos recibe a todos, a cada uno como es, y que no nos quiere cambiar, sino que quiere potenciar lo que somos nosotros”.
Durante la primera semana, los jóvenes estarán en Roma. Allí participarán de la misa de bienvenida en la Plaza de San Pedro; actividades de carácter cultural, artístico y espiritual; una jornada penitencial en el Circo Massimo; y momentos de entretenimiento con música y testimonios.
El cierre será en Tor Vergata, a diez kilómetros del centro de Roma. El sábado 2 habrá una vigilia con la participación del papa León XIV y, al día siguiente, la misa de cierre presidida por el pontífice.
“Ir con jóvenes a la ciudad donde está el papa, a un montón de actividades donde se espera que la esperanza nos reciba a todos con los brazos abiertos, a mí me llena de ilusión”, expresó Marciano.
Antes de regresar a Uruguay, se trasladarán a Medjugorje para presenciar el Mladifest, un evento anual de jóvenes católicos que se celebra en la primera semana de agosto.
“Es lindo participar en una experiencia con jóvenes de todo el mundo. Algo que he visto en las Jornadas Mundiales de la Juventud es que los jóvenes vuelven con el corazón lleno: algunos encontraron la vocación sacerdotal y religiosa, otros decidieron empezar formalmente una vida en la vocación matrimonial. Pero, sobre todo, vuelven con un empuje y una fuerza que, creo, hay que aprovechar mucho, especialmente en las comunidades donde estos jóvenes participan, para que puedan potenciar toda su vivencia de fe”, concluyó el sacerdote.
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