En viernes 13 de marzo, por la tarde, la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU) emitió un comunicado ante el avance del coronavirus en la región. En la misiva enviada a sacerdotes, diáconos, religiosos y fieles de la Iglesia Católica, los obispos del Uruguay explican que “Estamos viviendo una cuaresma muy especial a causa de esta pandemia y sin embargo nos estamos preparando para la Pascua, donde renovamos nuestra esperanza en el Señor resucitado”.

Recomendaciones para la celebración de la Santa Misa

Ante la situación, la CEU cree conveniente “dar algunas orientaciones de acuerdo con la fe, la prudencia y el sentido común, teniendo presente que son también expresiones del amor al prójimo y de su cuidado”. Además de invitar a todos a orar por los enfermos y a ofrecer la Santa Misa por los afectados, “rogando a Dios que, en su misericordia, nos auxilie y consuele”, los obispos recomiendan para las celebraciones litúrgicas las siguientes cautelas:

• Omitir el saludo de la paz.
• No poner agua bendita en las pilas situadas en los templos.
• En la distribución de la Comunión, sugerimos que se reciba en la mano.
• Será conveniente también que laven sus manos, antes y después de distribuir la Sagrada comunión, tanto el sacerdote como los ministros que participan en la distribución de la misma.

Para concluir el comunicado la CEU llama a rogar “para que el virus del miedo y la desconfianza no cierre el corazón, sino que confiemos en Dios, Señor de la vida, pues en sus manos estamos. Nos encomendamos a la Virgen de los Treinta y Tres, Patrona del Uruguay”. Esta carta de los obispos llega días después de que la Organización Mundial de la Salud haya caracterizado al brote del covid- 19, más conocido como coronavirus, como una pandemia.

Las medidas de las conferencias episcopales en otras partes del mundo

La Iglesia alrededor del mundo continúa ha adoptado diferentes medidas preventivas contra la difusión del coronavirus, adaptada según el contexto. En Europa, actual epicentro de la pandemia, el caso de Italia ha sido el más significativo. La Conferencia Episcopal Italiana el pasado 8 de marzo suspendió las misas hasta el próximo 3 de abril para evitar el contagio.

En España, las ciudades de Alicante, Ceuta y Sevilla han suspendido las procesiones y todas las celebraciones festivas de Semana Santa. Además las comunidades de Madrid y Álava suspendieron las misas. La conferencia episcopal de dicho país recomendó seguir las celebraciones litúrgicas por televisión o web. Por su parte, los obispos de Polonia decidieron que las misas diarias se transmitirán desde la capilla de Nuestra Señora de Czestochowa en Jasna Góra.

Otras medidas en la región

Por su parte, en nuestra región, a través de un comunicado la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) exoneró a los fieles de asistir a las misas de precepto dominicales de los días 15 y 22 de marzo, como una de sus medidas para evitar la propagación del coronavirus. Los prelados aconsejan participar de las misas mediante las transmisiones en las redes sociales y medios de comunicación, “sin necesidad de acudir a los lugares de culto”, y a los sacerdotes celebrar la Eucaristía con “asistencia reducida por las intenciones de los fieles y por la salud de nuestro pueblo”.

En tanto, en Argentina, el obispo de Río Gallegos, monseñor Jorge García Cuerva, informó a los fieles que esta mañana recibió un llamado del papa Francisco, debido a la reciente suspensión de las actividades por los 500 años de la primera misa en territorio argentino. El Santo Padre calificó como “prudente” la decisión del obispo argentino. También se canceló el IV Congreso Mariano Nacional que se celebraría en Catamarca.

Por su parte la agencia AICA, perteneciente al episcopado argentino, llamó a las personas en situación de riesgo por la pandemia a participar de la misa dominical a través de la celebración transmitida por la televisión pública de ese país. Además, se ofreció la posibilidad de la transmisión on line.