El Cardenal Sturla habló sobre violencia e ideología de género
El viernes 15 de diciembre, en el programa El Aporte de la Iglesia de Montevideo de Radio Oriental, el Cardenal Daniel Sturla reflexionó sobre el nivel de violencia que está viviendo nuestra sociedad. Además hizo algunas apreciaciones sobre la ley integral contra la violencia hacia las mujeres aprobada el miércoles 13 de diciembre en Cámara de Diputados.
“Hemos perdido el respeto por la vida humana”
El Arzobispo de Montevideo hizo referencia a las palabras del ministro del Interior, Eduardo Bonomi, que en declaraciones periodísticas afirmó que se perdió el respeto a la vida. “Es cierto, pero la vida humana, para muchos de los que habitamos este suelo, comienza en el día de la concepción”. Indicó que algunos “podrán decir que ese niño en ciernes o ese feto no es una persona humana. Pero ¿alguien duda que es una vida humana, y una vida humana distinta de la madre en cuyo seno se encuentra? Entonces claro que sí, que hemos perdido el respeto a la vida humana”.
El prelado argumentó que el respeto por la vida “se pierde también en la violencia asociada a la droga, porque hay un drama que tiene que ver con la educación de los uruguayos”. Sostuvo que esta violencia tiene estrecha relación con la pérdida de principios fundamentales de la tradición judeocristiana, como el respeto a la vida.
Colonización ideológica
También el Cardenal hizo referencia a la ley aprobada el miércoles 13 de noviembre. Dijo que en un primer momento se podría pensar que es positiva porque busca rechazar la violencia contra las mujeres, “que este año se ha cobrado tantas vidas y que tanto ha dolido a la sociedad toda”. Pero igualmente marcó algunos “peros”.
En primer lugar indicó que, sin ser jurista, comparte las críticas sobre la imprecisión de algunos de sus artículos. Recordó las palabras del senador colorado Ope Pasquet, quien observó que la ley en cuestión “termina con uno de los elementos claves del derecho al plantear la desigualdad ante la ley” ya que supone una protección para las mujeres y no tiene en cuenta los dramas por los que puede pasar la otra mitad de la población.
Después, el prelado mencionó que en el debate de la Cámara de Diputados se hizo referencia al patriarcado y se hostigó a la Iglesia Católica. “Ese dedo acusador que se ha transformado en manifestaciones violentas y profanación de iglesias, como se ha dado en tantas partes del mundo y como se ha intentado acá”, continuó.
Para el Cardenal Daniel Sturla las motivaciones de esta ley surgen en “esa difusa, pero también muy bien organizada, ideología de género”. Remarcó que esta corriente es imperialista porque busca “colonizar ideológicamente a los pueblos y en especial a los más pobres, imponiéndose a través de préstamos que quedan sujetos a la aprobación de determinadas leyes”. Sostuvo que la ideología de género es financiada por el Fondo de Población de la Naciones Unidas (UNFPA) y por otros intereses económicos. El Arzobispo indicó, asimismo, que la ideología de género “está por fuera del sentir común” de los pueblos.
“Defender la libertad de todos”
Más adelante en su audición, el Cardenal manifestó que en la ley aparecen cosas “asombrosas” y citó un escrito de la Dra. Carmen Asiaín. La experta observa que “se plasma en varios artículos del proyecto la imposición estatal de una ideología, una y sólo una postura filosófica e ideológica incluso a instituciones privadas”. En ese mismo documento, la jurista afirma que existe “la imposición de una ideología única por y desde el Estado. Un desconocimiento de la libertad de ideario institucional, de la libertad de cátedra”.
Después el Arzobispo de Montevideo dijo que “no deja de haber totalitarismo cuando se impone algo a través de sentimientos que todos compartimos (como combatir la violencia contra la vida humana, de modo especial contra las mujeres) pero con leyes que son injustas y que responden a una ideología que termina desnaturalizando la realidad de la humanidad”.
Finalmente, el prelado llamó a defender la libertad de todos: “Defendamos la dignidad de toda persona humana, defendamos la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural”. Pidió no dejarse “embaucar por ideologías que tienen detrás de sí un sentido de colonización ideológica para lo cual cuentan con recursos abundantes”.