Se celebró la 40° Jornada nacional de la Juventud
Ya de antemano se preveía que sería una fiesta y los hechos lo confirmaron. Más de 700 chicos participaron en la Jornada Nacional de la Juventud, que en su 40 aniversario se celebró el sábado 1° de setiembre en el Colegio Seminario.
La jornada se estructuró en tres grandes bloques: formación, misión y celebración. Un programa completo que estuvo regado de música, alegría, encuentros y amistades. Al comienzo se presentó el Programa Misionero Jacinto Vera y su misión Casa de Todos. Por medio de un video, se transmitió a los más jóvenes su responsabilidad en este proyecto que involucra a toda la Iglesia de la ciudad.
Eso sirvió para situar a todos en clima: cada uno de los presentes comenzó a tomar conciencia de que es un misionero “24/7”, a toda hora, todos los días. Y para anunciar hay que formarse, y por eso hubo a continuación 13 talleres dictados por sacerdotes, religiosas o laicos. Los chicos habían elegido a cuál asistir y se dividieron por intereses: la oración, la vocación, el ABC de la fe, el servicio, feminismo e ideología de género, crisis de fe.. Todos siguieron dinámicas diferentes pero con algo en común: una exposición ágil y amena, y luego un momento de intercambio y experiencias.
El Padre Juan Andrés Verde hizo una charla de cierre de la instancia, donde profundizó sobre los tres conceptos clave de la jornada: la misión 24/4, Casa de Todos y el trabajo “cuerpo a cuerpo”.
Bandas musicales animaron a lo largo del día. En el escenario estuvieron los Pelícanos de Sión, Ecos, Kerygma y John Boss Rock. Cada una con su estilo, fueron también un testimonio de misión y de la alegría que produce conocer el Evangelio.
Misión
Diego López y Nicole Mass, palotino uno y de Shalom la otra, fueron los grandes anfitriones de la Jornada. Simpáticos, desenvueltos y comprometidos, guiaron y animaron en todo momento. También dieron unos consejos para tener en cuenta a la hora de hacer misión, y eso fue el puntapié para el comienzo de la tarde. Organizados en grupos, los chicos salieron por distintos barrios para encontrarse con la gente y anunciar al Señor.
Las situaciones que se dieron fueron de lo más variadas. Algunos fueron de a dos, otros iban de hasta ocho. Hubo grupos que en seguida entablaron largas conversaciones, otros apenas dialogaron o tuvieron que caminar varias cuadras para que alguno de los que encontraron aceptara su mensaje de felicidad en Jesús. En todo caso, todos volvieron tres horas más tarde y compartieron agradecidos lo vivido.
Celebración
El momento culmen se vivió al final, ya en el templo del colegio, la Parroquia del Sagrado Corazón. Hubo una hora santa donde reinó el clima de oración y adoración a Jesús presente en la Eucaristía. Unos chicos leían un texto que ayudaba a meditar, intercalado con cantos. Además, había 14 sacerdotes impartiendo el sacramento de la reconciliación a todos los que lo quisieran, que hacían filas para recibir esta gracia.
La Misa estuvo presidida por Mons. Luis Eduardo González, Obispo Auxiliar de Montevideo. Fue su primer gran encuentro con la juventud de su diócesis, pues todavía no hace dos meses que fue consagrado. En el presbiterio lo acompañaron el vicario de los jóvenes, P. Mathías Soiza, y el rector del Seminario, P. Marcelo Copetti. Otros 17 sacerdotes concelebraron, asistidos por un diácono y una decena de acólitos.
La alegría de la fiesta dominical fue, sin duda, un gran modo de agradecer al Señor por una jornada que dio mucho de sí. Al mismo tiempo, sirvió para pedirle a María que, como ella, todos los presentes se animen a decirle sí al pedido de su Padre.