En el Hogar Geriátrico P. Benito Menni, ubicado en Hnos. Gil 927 (Barrio Capurro), se realizó el pasado 23 de diciembre un hermoso Pesebre Viviente protagonizado por los mismos ancianos que viven en el hogar.
En un clima de honda y festiva alegría se prepararon los abuelos del Hogar, animados por todo el personal allí presente, bajo la coordinación atenta y cariñosa de la encargada de Pastoral y Comunicación, María del Carmen Núñez.
Una excelente musicalización ayudó a recrear el Nacimiento de Jesús y convertir la representación en una auténtica celebración del Nacimiento del Niño Dios.
Luego del pesebre hizo su aparición la figura de Papá Noel, llevando a los abuelos los regalos que sus familiares les enviaban. Más tarde llegó el baile, donde junto a los abuelos, el personal médico y no médico, intercambiaron sus pasos de danza, para expresar su alegría.
Fernando Trianon es médico geriatra y se desempeña como director técnico del Hogar. Trianon elogió la celebración de la Navidad organizada por los funcionarios del hogar y su positiva influencia en el estado emocional de los residentes, destacando que los ancianos “se sienten queridos y protegidos”, ya que todo el personal busca ofrecerles una buena calidad de vida y que “puedan disfrutar de la vida lo más que se pueda”.
En tiempos de pandemia, el personal ha buscado utilizar estrategias lúdicas, unidas a las celebraciones, con el fin de vivir con alegría, la Buena Noticia y transformar el dolor en sonrisa.
Haciendo un poco de historia
El Hogar geriátrico funciona en Uruguay desde 1966 y deriva de una institución que fue fundada en España en el año 1881.
Los fundadores fueron San Benito Menni, religioso de la orden de San Juan de Dios, pionero de la renovación psiquiátrica en el siglo XIX; la Venerable María Josefa Recio y María Angustias Giménez que, unidas en la amistad por la llamada de Dios, acogieron con determinación, valentía y entrega el carisma Hospitalario.
Actualmente en Uruguay hay una comunidad de dos hermanas que ocupan cargos de dirección y servicio. Las religiosas, junto con un grupo de cinco laicos que conforman el equipo de pastoral de la salud, aseguran la continuidad del carisma hospitalario en ambas instituciones. Todos los días se celebra la Santa Misa, se reza el rezo del rosario y siempre está a disposición la palabra cercana y el acompañamiento. Su vocación se expresa sirviendo a Cristo sufriente, que encuentran en cada adulto mayor.
La congregación de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús cuenta en Uruguay con dos servicios: el Hogar Geriátrico P. Benito Menni, ubicado en Hnos. Gil 927 y el Centro de Rehabilitación Psicosocial Benito Menni, en Solís Grande 946, ambos en el barrio Capurro de la ciudad de Montevideo.

El Hogar cuenta con un servicio de enfermería las 24 horas del día. Fuente: Federico Gutiérrez
La actualidad del Hogar Geriátrico P. Benito Menni
Con una capacidad para 106 personas, el Hogar Geriátrico de las Hermanas brinda una atención integral a adultos mayores de ambos sexos, dependientes o semidependientes, física o mentalmente, en un régimen de internación de 24 horas. En el momento viven 88 personas, en su gran mayoría mujeres.
El Hogar cuenta con un servicio de enfermería, acompañamiento en la actividad cotidiana de los ancianos dependientes, servicio de cuatro comidas diarias y colaciones. Además hay servicio de lavandería, clases de gimnasia en grupo, fisioterapia individual en los casos prescriptos por el médico, taller de estimulación cognitiva, taller de manualidades y taller de música. Con respecto a las actividades pastorales se celebra la Santa Misa, para las personas que quieren participar. Asimismo se realizan festejos en días conmemorativos propios de la Congregación y del país y actividades recreativas.
El edificio tiene amplios espacios comunes, terrazas y jardines que facilitan la socialización del anciano con una accesibilidad total.
La centralidad en el enfermo es lo más importante, eje y motor de su servicio día a día. La concepción de atención integral en este hogar se basa en la dignidad de la persona y se concreta en una atención de calidad que incluye los aspectos físicos, psíquicos, sociales, éticos, espirituales y religiosos centralizados en el adulto mayor. A lo largo de los años se han atendido a usuarios con diferentes problemáticas hasta que se llegó al perfil actual. Se ha elevado sustancialmente el promedio de edad, y el deterioro funcional y cognitivo se transformó en una característica del actual perfil del usuario. Los nuevos ingresos se caracterizan por ser un tipo de anciano más deteriorado, con mayor dependencia y atención.
El Centro de Rehabilitación Psicosocial Benito Menni
El Centro de Rehabilitación Psicosocial Benito Menni tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de personas que padecen trastornos mentales severos y persistentes, apostando a la habilitación, rehabilitación e inserción social de los residentes.
El Hogar Protegido es una casa grande y funcional, que tiene capacidad para 25 usuarios provenientes de ASSE a través de convenio con la Asociación de Hermanas Hospitalarias y diez usuarios privados. Asisten pacientes adultos de ambos sexos de larga estadía institucional, con posibilidades de egreso, portadores de patología crónica, compensados, estables y auto válidos, con una edad que varía entre los 15 y 45 años. Son personas que en general cuentan con algún referente, que apoye el proceso de rehabilitación; tienen una pensión por discapacidad o están en trámite de la misma.
Dentro de este centro hay dos proyectos: “Residencia Asistida” y “Vecindad”. En el año 2002 nace el primer Proyecto de Residencia Asistida, que busca contribuir a que se mantenga una buena calidad de vida para las personas que han transitado por la experiencia del Hogar Protegido. El proyecto de “Residencia Asistida” surge como un nuevo nivel de intervención en el marco de la rehabilitación psicosocial tomando como referencia la experiencia de la Congregación en más de 350 centros y dispositivos, distribuidos en África, Asia, Latinoamérica y Europa.