El amor familiar: vocación y camino de santidad
Entre el miércoles 22 y el domingo 26 de junio se llevará a cabo en Roma el “X Encuentro Mundial de las Familias”, cuyo lema será: “El amor familiar: vocación y camino de santidad». Cabe recordar que el Encuentro debió ser en 2021 pero la pandemia no lo permitió. Justamente, en julio del pasado año, el papa Francisco presentó a través de un video cómo se llevará a cabo esta edición del Encuentro. En su mensaje dijo: “en los encuentros anteriores, la mayoría de las familias se quedaba en casa y se percibía el encuentro como una realidad lejana, a lo sumo seguida por televisión, o desconocida para la mayor parte de las familias”. Por este motivo, el santo padre propuso una modalidad inédita que involucra a todas las familias que se sientan parte de la comunidad eclesial. “El encuentro tendrá una modalidad multicéntrica y extendida, que favorezca la implicación de las comunidades diocesanas de todo el mundo”, mencionó. Roma será la sede principal, y allí asistirán delegados de la pastoral familiar que participarán de la fiesta de las familias, el congreso pastoral y la santa misa. Todos estos momentos serán retransmitidos en todo el mundo.
Durante esos días, el papa Francisco invita a que cada diócesis sea el centro de un encuentro local para sus familias y comunidades, de modo que también puedan participar quienes no estén en Roma. “Les pido que sean dinámicos, activos y creativos para organizarse con las familias, en sintonía con lo que se celebrará en Roma”, indicó el santo padre. Con motivo de este pedido, la Arquidiócesis de Montevideo se adhiere a la propuesta y presenta para ello un itinerario de formación y desarrollo a partir de los materiales publicados por Roma.
Uruguay estará representado
Entre Todos conversó con Gustavo Rodríguez, que junto a su esposa Mónica se encargan de la pastoral de las familias en la Arquidiócesis de Montevideo. El próximo 18 de junio partirán con destino Roma. Formarán parte de la delegación uruguaya junto al actual director de la Comisión Nacional de Pastoral Familiar, Mons. Fabián Antúnez, y a quien lo fue hasta abril pasado, Mons. Alberto Sanguinetti. También viajarán los matrimonios encargados de la secretaría ejecutiva tanto de la actual como de la anterior comisión. “Me parece relevante destacar la continuidad entre las comisiones y la participación en el encuentro de dos obispos y tres familias en representación del país”, indicó Gustavo.
“Tenemos mucha expectativa por este Encuentro Mundial de las Familias. Por un lado, no es novedad que en las diferentes culturas y países las personas tienen dificultades para desarrollar sus vínculos de manera sana y feliz. Ello se evidencia en las múltiples parejas separadas, la cantidad de niños y jóvenes angustiados o tristes y en tantos corazones rotos. Por supuesto que Uruguay no es la excepción a esta situación, incluso para aquellas personas que han conocido a Cristo y son parte de las comunidades parroquiales”, contó Gustavo. Con respecto al lema propuesto por el papa para este encuentro, resaltó la amplitud y el alcance de los temas que se van a tratar. No se trata únicamente de un amor matrimonial, sino de un amor familiar: “la relación entre padres e hijos, la relación con los abuelos y personas mayores, las madres o padres solteros, los vínculos rotos, en definitiva, todas las realidades familiares. Esto es novedoso y apasionante puesto que nadie queda afuera de la propuesta”, subrayó.
Siguiendo con el lema, vinculó la referencia a ‘camino y vocación’ con lo que las catequesis preparatorias al encuentro que propone la Arquidiócesis de Montevideo procuran, que es iluminar la vida familiar desde una perspectiva de vocación y de llamado de Dios.
Por último, con respecto al ‘camino de santidad’, Gustavo hizo la reflexión siguiente: “aquellos que vivimos en contexto familiar podemos pensar: ¿qué tiene de santidad hacer mandados, cambiar pañales o trabajar mucho para pagar los gastos de la casa? En las catequesis preparatorias del encuentro se explica la santidad como el desarrollo cotidiano del amor, expresado y dirigido al entorno en el cual vivimos. El desarrollo de la santidad cotidiana no es ni más ni menos que buscar activamente seguir la guía de Jesús”.
Una invitación a participar
Como se dijo anteriormente, esta edición del encuentro está pensada para que cada persona, desde el lugar en el que esté, pueda participar. “Animamos a las personas, familias, comunidades, religiosos, diáconos y sacerdotes, a escuchar las conferencias y testimonios, para luego tener varias conversaciones para discernir cuáles pueden ser las experiencias aplicables a cada contexto particular”, concluyó Gustavo.
Haciendo historia
Nació por voluntad de san Juan Pablo II en 1994, quien quería que la Iglesia tuviera su Año de la Familia. Desde ese momento y cada tres años, se celebra en distintas partes del mundo el Encuentro Mundial de las Familias. La primera edición fue en Roma y luego las sedes fueron: Río de Janeiro, Roma, Manila, Valencia, Ciudad de México, Milán, Filadelfia, Dublín y en los próximos días, nuevamente Roma.